Nueve meses de prisión para el propietario de un perro que apareció ahorcado en un cortijo
Gracias al esfuerzo y la perseverancia de la Asociación Galgos del Sur, el responsable de la muerte de Simba ha recibido su castigo.
El Juzgado de lo Penal número 2 de Jaén ha condenado a nueve meses de prisión al propietario de Simba, un perro de raza labrador que apareció ahorcado en un cortijo en ruinas de Jódar, municipio de Jaén. Además, al responsable de los hechos se le ha impuesto una pena de 3 años de inhabilitación especial para la tenencia de animales y el ejercicios de profesión, oficio o comercio que tenga que ver con ellos.
La sentencia final ha sido posible gracias a la denuncia inicial de los hechos por parte de la Asociación Mágina Animal de Jódar y a la lucha insaciable de la protectora Galgos del Sur. La organización de defensa de galgos ejerció como acusación popular en el juicio de la muerte de Simba. En un primer lugar, el caso fue archivado por el Juzgado de Instrucción número 3 de Úbeda y posteriormente fue reabierto por la Audiencia Provincial de Jaén tras un recurso de apelación presentado por la propia asociación.
Según indica Galgos del Sur, la sentencia considera que durante el mes de octubre 2020, el propietario de Simba condujo al perro hasta un cortijo en ruinas de la localidad de Jódar y, “guiado por el ánimo de ocasionarle la muerte, ató una cuerda al cuello del animal y a un viga para ahorcarlo”. Posteriormente, “el acusado procedió a dar de baja al animal”, alegando falsamente un accidente como causa del fallecimiento.
El caso de Simba: una muerte que no ha quedado impune
Dulce Aguilera, del despacho jurídico Justicia Animales & Medio Ambiente y abogada de Galgos del Sur, ha valorado positivamente el juicio contra el propietario: “Nos sentimos tremendamente satisfechos por la sentencia obtenida, ya que nos hemos encontrado con multitud de trabas a lo largo del procedimiento para sacarlo adelante”.
Sin embargo, Aguilera lamenta que “de no haber sido por la personación como acusación popular de Galgos del Sur, este caso hubieses sido archivado y olvidado por completo sin ningún tipo de repercusión, tal y como pasa en la gran mayoría de procedimientos penales por maltrato animal y donde la acusación la realiza el fiscal”.
La abogada de defensa animal considera que “precisamente ahí es donde radica la importancia de las acusaciones populares y particulares en este tipo de procedimientos donde prácticamente se convierten en garantes de la continuidad del proceso penal”.