La Associació d’Advocats en Defensa Animal de Tarragona ha denunciado a los dos agentes responsables de la muerte de Shaitán
Ha vuelto a pasar. La falta de formación específica en etología y manejo seguro de los perros ha desencadenado otro final trágico. El pasado viernes un agente de la policía local de Calafell (Tarragona) mató a tiros a un perro llamado Shaitan. Los hechos sucedieron después de que varios vecinos avisaran a los agentes sobre la presencia de un rottweiler suelto por la zona. El desenlace fue la muerte del animal causado por tres disparos de la policía.
La versión policial oficial explica que una patrulla de la Policía Local de Calafell acudió a la urbanización de Valdemar tras las quejas vecinales sobre la presencia de un perro rottweiler que paseaba suelto por las calles de la zona. Cuando un miembro de la patrulla quiso acercarse a Shaitan, el animal supuestamente acorraló e incordió al agente, motivo por el cual este le disparó tres tiros en la cabeza que causaron la muerte del perro.
Igual que sucedió con el caso de la perra Sota, quien también murió por el disparo de un Guardia Urbana, existen testimonios que difieren de la versión policial. Algunos vecinos aseguran que “la Policía Local de Calafell disparó de manera precipitada cuando el animal tan sólo se disponía a entrar a su casa”. También hay testimonios que aseguran que “Shaitan es un perro muy tranquilo que nunca había causado ningún problemas con nadie de la zona”.
La Associació d’Advocats en Defensa Animal de Tarragona ha denunciado a los dos agentes de la Policía Local de Calafell responsables de la muerte del perro. Esta asociación considera que hubo maltrato por parte de los agentes hacia el rottweiler, un maltrato que desencadenó en la muerte del animal. ADAT argumenta su denuncia en base a los testimonios que aseguran que “en ningún momento el perro tuvo una actitud agresiva ante la policía”.
Los abogados animalistas han denunciado a los dos agentes de la Policía Local de Calafell ya que no existe conocimiento cierto sobre quien de los dos disparó al animal. ADAT también ha difundido un video en el que se muestran imágenes del comportamiento de Shaitan, un perro aparentemente tranquilo y cariñoso.
Cada vez se repite con más frecuencia este tipo de incidentes entre agentes de la policía y animales. Urge encontrar una solución para que estas situaciones nos desencadenen siempre en la muerte del animal. Lo que parece claro es que los cuerpos policiales necesitan una formación en la que se les enseñe a manejar distintas situaciones con los animales, así evitaremos que estos acaben siempre tiroteados.