“Es posible alimentar a un perro con una dieta vegetariana, pero es más fácil hacerlo mal que hacerlo bien”.
Son muchas las personas que se plantean la contradicción moral que supone dar comida de origen animal a sus perros cuando ellos solo consumen alimentos vegetales. Estos amantes de los animales, para poder acabar con esta oposición de ideas, se preguntan: ¿puedo hacer que mi perro sea vegano?
Para responder esta cuestión, Animalados ha hablado con Mónica González Tovar, certificada en Dietética y Nutrición por la Universidad Camilo José Cela, miembro de la Raw Feeding Veterinary Society del Reino Unido, certificada como Auxiliar Veterinaria por la Universidad Antonio de Nebrija y especialista en Nutrición Cruda para perros por la Dogs Naturally University. Además, dirige cursos online y comparte consejos sobre nutrición animal en la web https://monicagonzaleztovar.com/
¿Puedo hacer que mi perro sea vegano?
Me gustaría empezar con una opinión que comparto de la Dra. Daniela Dos Santos, Presidenta de la Asociación Británica de Veterinarios, con respecto a dietas vegetarianas: «Teóricamente sí es posible alimentar a un perro con una dieta vegetariana, pero es mucho más fácil hacerlo mal que hacerlo bien”.
Es decir, por poder, podrías hacer que un perro se alimentara con una dieta vegetariana. Pero a nivel nutricional y en mi opinión profesional no es lo mejor para él. En caso de decidir hacerlo siempre hago énfasis en que hay que hacerlo asesorado por un veterinario especialista en nutrición vegana de perros (y no por marcas comerciales).
¿Los perros son animales exclusivamente carnívoros?
El perro es lo que se denomina un carnívoro facultativo-omnívoro oportunista. Esto quiere decir que la dieta más adecuada para él es la dieta de un carnívoro. De hecho, su anatomía, su fisiología, sus hábitos y comportamientos alimenticios pertenecen a los de un carnívoro y, de hecho, ha tenido esta alimentación durante millones de años.
Lo que ha pasado es que cuando aparecieron los humanos sobre la faz de la tierra (con la etapa de seguimiento de campamentos y la etapa de la domesticación del perro, ambas muy recientes), los perros se fueron convirtiendo en omnívoros oportunistas. Es decir, comían las sobras que iban dejando los humanos (huesos y restos de animales que los humanos no comían y algo de sus desperdicios vegetales) y se convirtieron un poco en los “recoge-basuras” de los residuos de los campamentos y asentamientos humanos.
De esta forma, en las épocas de hambruna o de escasez de presas comían lo que encontraban entre los residuos de los humanos. Pero aquí es muy importante comprender que tanto la etapa de seguimiento de campamentos como la de la domesticación son etapas muy muy cortas en lo que es la evolución del genoma nutricional del perro.
Esto quiere decir que sigue siendo, en primer lugar, un carnívoro, ya que tiene una anatomía y fisiología mucho más eficientes para aprovechar y digerir los nutrientes presentes en sus presas y no así para aprovechar a plenitud los presentes en los vegetales.
Entonces… ¿puede ser peligroso que la alimentación de un perro sea vegana?
Aquí me remito nuevamente a la primera pregunta. Yo no recomendaría nunca una dieta vegana, ya que es muy fácil hacerlo mal y provocar deficiencias nutricionales a nuestros perros. Si no se hace con el asesoramiento directo de un profesional realmente experto en nutrición vegana para perros, puede ser muy peligroso.
¿La dieta vegana en perros implica el déficit de nutrientes esenciales?
Sí. En primer lugar, es muy importante comprender dos cosas:
1- Las proteínas constituyen el nutriente más importante para perros y gatos.
2- No todas las proteínas son iguales.
Os pido que me tengáis un poco de paciencia con esta explicación, pero es vital para poder entender por qué puede haber déficit de nutrientes en perros y gatos veganos.
Cuando hablamos de la “calidad” de una proteína, dependemos de dos factores: su digestibilidad y la cantidad de aminoácidos esenciales que contiene. Entonces una proteína “de buena calidad” para un perro o un gato es totalmente diferente de una proteína “de buena calidad” para un caballo o una vaca.
La proteína vegetal es, en primer lugar, muy difícil de digerir para los carnívoros, debido a que su sistema digestivo es muy corto, a que no posee la cantidad de enzimas adecuadas para digerirlas eficazmente y a otros factores fisiológicos mucho más complicados.
En segundo lugar, las proteínas vegetales NO contienen todos los aminoácidos esenciales para perros y gatos, por lo que habría que adicionarlos a la dieta de forma rigurosa para evitar deficiencias y enfermedades como la miocardiopatía dilatada (que aparece por deficiencia de Taurina, un aminoácido presente únicamente en la proteína animal).
Además de esto hay otros nutrientes esenciales como las vitaminas B12 y D, así como minerales como calcio, yodo y zinc a los que tendría que prestarse muchísima atención a la hora de formular una dieta vegana ya que su deficiencia puede provocar efectos devastadores sobre la salud de perros y gatos.
Si se decide hacer el cambio a dieta vegana, ¿cómo debe hacerse?
Bajo la supervisión de un veterinario especialista en nutrición vegana de perros, acatando todas sus directrices.
¿Qué alimentos podemos encontrar dentro de una dieta vegana para perros?
Las personas suelen utilizar dietas comerciales, aunque también hay quien prefiere preparar una dieta casera. Entre los ingredientes más comunes en dietas veganas para perros están: verduras de hoja verde como las espinacas, kale, acelgas, etc. También lentejas, arroz, brócoli, calabacín, zanahorias, calabaza y ciertos tipos de frijoles (cuidado porque los pueden causas trastornos gastrointestinales en los perros. Frutas como plátanos, manzanas o mandarinas también pueden consumirlas.
Es importante saber que, aunque tengamos la información nutricional de estos ingredientes y los veamos como “muy saludables”, lo más importante es saber si perros y gatos pueden digerir y aprovechar estos nutrientes y, en caso de hacerlo, en qué proporción, ya que es esta información la que nos permitirá añadir los suplementos necesarios para hacer de esta dieta una dieta adecuada para la salud de los peludos.
¿Es asequible económicamente una alimentación vegana para perros?
A nivel comercial los piensos veganos suelen ser bastante costosos, algunos incluso más caros que los que contienen ingredientes de origen animal. Cuando hablamos de dietas caseras puede ser mucho más económico si nos fijamos solo en los ingredientes, pero hay que tomar en cuenta que hay que añadir suplementos imprescindibles que también habrá que estimar en los cálculos.
Y con los gatos… ¿es posible aplicar una dieta vegana?
Rotundamente no. A diferencia de los perros, los gatos son lo que se denomina “carnívoros obligatorios o estrictos”. Los gatos no tienen la capacidad de adaptación que podría tener un perro a esta dieta, ni a nivel anatómico ni a nivel fisiológico y no la recomiendo en ninguna circunstancia.
¿Qué le dirías a las personas veganas que se plantean la contradicción moral que supone dar comida de origen animal a sus perros?
Entiendo perfectamente la preocupación y frustración de las personas veganas por el entorno, la sostenibilidad y todo lo que rodea la industria de la explotación animal, pero es muy importante entender que perros y gatos necesitan una alimentación adecuada a sus necesidades nutricionales y esto, significa que la mejor dieta para ellos es una basada en presas animales. Si hemos escogido compartir nuestra vida con pequeños carnívoros, lo más ético, desde mi punto de vista, es que les demos los alimentos para los que han evolucionado durante millones de años.