Los perros de los Encantes pierden su parque

Los vecinos de la plaza de las Glòries han perdido desde este martes el gran parque que servía como zona de recreo para sus perros. La reanudación de las obras del túnel de Glòries, que se suspendieron el año pasado después de que el Ayuntamiento detectara un encarecimiento y un retraso injustificados, y la creación del Parque Canopia en una gran explanada han comportado el precinto de una gran zona que los vecinos utilizaban para dejar correr a sus perros. «Este espacio nos iba muy bien, sobre todo porque los vecinos que veníamos tenemos los perros bien educados», explica la Esperanza, que tiene una perra que se llama Lola.

La valla apareció el martes por la tarde y, según reconocen los dueños de los perros, alguien la abrió de manera que por la noche todavía pudieron usar el espacio. Este miércoles, sin embargo, la valla ya está fijada y no se puede abrir. «Es una pena porque aquí los perros corrían muy contentos. Es como si aquí fueran menos agresivos que cuando están en pipicanes, como si las vallas los pusieran nerviosos «, dice Carlos, mientras su perro, Spark, huele la nueva valla que limita su espacio.

La futura plaza prevé la construcción de una nueva área de recreo para perros, pero ni será tan grande ni se construirá en breve. Por este motivo, los afectados reclaman que, hasta que no empiecen realmente las obras, los permitan utilizar el espacio. «Ahora tendremos que ir a la Estación del Norte», lamentaba otro vecino afectado. Todos ellos coincidieron en criticar que «en esta ciudad faltan espacios para los perros».

Actualmente, se están creando nuevas áreas para perros, pero según los dueños de los perros, son insuficientes. Consulta desde este link las áreas actuales y las que hay en construcción.

Llevar a nuestro gato a un centro veterinario experto en felinos: la mejor opción

Hoy cada vez son más las personas que tratan a sus gatos como un miembro más de la familia. Cuando nuestro querido gato enferma, somos muchos los que nos encontramos con la emergencia de tenerlo que llevar a un veterinario. A veces, si es una urgencia, no hay tiempo de informarse sobre el centro más apropiado. Por eso es muy importante tener previsto un centro de confianza con antelación, haberse informado sobre las instalaciones, especialidades, tratamientos, equipo técnico, y toda la información posible para cuando sea necesaria la visita.

En este sentido es muy recomendable llevar a nuestros queridos gatos a un centro especialista en medicina felina. Para los gatos, es muy estresante ir a la consulta del veterinario y aunque se les puede entrenar para la visita, donde mejor puede encontrarse un gato asustado es en un lugar en el que no hay choque de olores, estrés de otros animales o ruidos. En los centros felinos, podemos estar seguros, de que tanto en la consulta como en la zona de ingreso, de que nuestro gato estará en una jaula especialmente diseñada para gatos, en la que no se puede ensuciar la comida con arena, y en la que se mantendrá limpio y seco, aparte de otros animales, aislado de ruidos estresantes. El aislamiento de ruidos, junto con el nivel de luz y los olores son muy importantes en la reducción de estrés en la clínica. La reducción de estrés en los centros felinos es muy notable, tanto en el manejo, ya que son expertos, como en todo el recinto, puesto que sólo tratan gatos. Los gatos que padecen enfermedades infecciosas, son tratados en instalaciones aparte, con todas las medidas de seguridad.

Los veterinarios expertos en medicina felina solo tratan gatos y en este sentido son más especialistas en enfermedades felinas, en el manejo de los gatos durante la visita y las pruebas. Por ejemplo, para un gato una ecografía es muy estresante: el ruido de la máquina de afeitar eléctrica, la sensación extraña en el abdomen, el gel frío y con alcohol (tóxico por inhalación). El ruido de la maquina cortapelo y la consiguiente aplicación del gel frío con alcohol sobre el vientre es una sensación muy estresante para el gato, jamás conocida por él hasta ese momento. Es por esto que los protocolos de ecografías abdominales se hacen con sedación porque resultan muy estresantes. Y aquí, es el propietario quién debe estar bien informado de que una sedación entraña riesgo. Algunos centros felinos hacen las ecografías sin sedación, con poca luz y sin rapar el abdomen, con el gato de pie a cuatro patas, teniendo el máximo cuidado en no causar estrés y tomando todo el tiempo necesario que necesita el gato para hacer la ecografía.

Tim el gato de las fotos fue tratado en un centro felino de una colangitis. Se le realizó ecografía sin rapado ni gel para obtener diagnóstico por imagen, y afortunadamente, empezó a comer tras tres días de ingreso, y no se le tuvo que poner sonda esofágica. En un centro de medicina felina todas las pruebas que han de realizarse a un gato tienen menor impacto de estrés.

Hoy empiezan a despuntar los centros felinos que tratan a los gatos como gatos que son, es decir, según su comportamiento. No tienen prisa para hacer la ecografía y la hacen con el gato a cuatro patas, sin sedación, claro que siempre que sea posible. El manejo del gato por veterinarios expertos en felinos es muy suave y tiene en cuenta la etología y las emociones del gato en cada momento. En un centro felino, con toda seguridad, nuestro gato será tratado como el gato que es.

Un día, tarde o temprano, nuestro minino tendrá que ir a la consulta veterinaria, y es por ello que más vale estar prevenido y tener nuestro centro felino de referencia contactado, pues es donde podemos tener la seguridad de que nuestro gato será tratado por expertos en felinos.

 

El zoo dice que apuesta por la protección, pero mantiene animales sin riesgo de extinción

El nuevo plan estratégico prevé la llegada de especies en peligro de extinción, en programas de conservación y mediterráneas, así como la «salida» de animales que no cumplan estos criterios.

El zoo de Barcelona ha anunciado cambios de gran alcance en su estructura. El proyecto tiene como objetivo principal la conservación de animales mediterráneos que estén en conservación o en peligro de extinción. Por ello, según ha afirmado la dirección del zoo, se avanza hacia un espacio sin camellos, rinocerontes e, incluso, tigres, por no cumplir estos criterios. En cambio, se incorporarán otras especies mediterráneas y en peligro, como el tritón del Montseny o la tortuga del arroyo, entre otros.

El plan cuenta con un presupuesto de 64,4 millones de euros y se llevará a cabo entre 2018 y 2031. Su director, Antoni Alarcon, ha asegurado que «es prioritario acoger animales que presentan un alto nivel de amenaza». Por este motivo, el zoo no acogerá más rinocerontes o camellos, en palabras del propio Alarcon, una vez se trasladen o mueran los que actualmente quedan en el zoo. Un criterio que no se mantendrá en el caso de los pingüinos, que a pesar de no ser autóctonos, ni estar en peligro, se mantendrán.

Críticas al proyecto

Marta Gumà, presidenta de la Liga para la Defensa del Patrimonio Natural, se muestra crítica: «si el criterio es mantener animales en peligro, y autóctonos, por qué los pingüinos del zoo se quedarán?», pregunta. Según Gumà, el zoo adopta esta doble vara de medir «porque el pingüino es mediático y atrae visitantes». Un criterio que nada tiene que ver con la creación de un espacio de protección de animales en peligro.

«El zoo presenta muchas infraestructuras en mal estado, que no favorecen el bienestar animal«, lamenta Gumà. «Con el dinero que han invertido, se podría haber resuelto este problema también». Además, uno de los inconvenientes más grandes, según la defensora de los animales, «es que el proyecto no hable de acogida de animales, por ejemplo, los que vienen de circos».

Además, este proyecto, que cuenta con la aprobación del consistorio, es diferente a la promesa que había hecho Ada Colau sobre un espacio que evite la exposición de animales.

Emma infante, experta en Derecho Animal y Sociedad, «agradece al nuevo director la voluntad de mejorar las instalaciones, tal y como las asociaciones animalistas llevan tiempo reclamando». Infante también lamenta que las propuestas «no acaben con la exhibición animal.»

Reducción de especies en el zoo, incorporación de nuevas

El proyecto prevé pasar del 15% de fauna autóctona al 30%. Así, se priorizará la llegada de la Nutria, el tritón del Monseny, anfibios del Empordà, las mariposas del Área Metropolitana, o el fartet del delta del Llobregat, entre muchos otros. También se quieren incrementar las especies en un alto nivel de amenaza, pasando del 22% al 40%.

Todo ello, se hará en detrimento de más de 100 especies, que dejarán el zoo. O bien porque se trasladarán a otros espacios o bien porque no se incorporarán otros una vez mueran. Por ello, el zoo podría quedarse con poco más de 200 especies. El director del zoo ha asegurado que «esto no significa reducir el número total de animales». Pero lo que seguro que cambiará es el zoo tal y como lo conocemos.

El área para perros de Hospital Clínic recibe críticas de vecinos y asociaciones

La asociación Udols se muestra crítica con varios puntos del área de la Calle Casanova 145

Sólo llegar, un chico casi tropieza. El área  para perros de Hospital Clínic, situada en el mismo cruce del Hospital, tiene bastantes defectos. La entrada cuenta con un pequeño rellano de cemento de pocos metros, donde los perros se acumulan para evitar las piedrecillas punzantes del resto del espacio. Los perros, al correr, llevan allí las piedras y por este motivo es fácil resbalar. Además, según varios usuarios con los que hemos hablado, a los animales no les gustan las piedrecitas que llegan incluso a ocasionarles daños en las patas. 

El área forma un cuadrilátero no uniforme, de pocos metros cuadrados. Los perros evitan correr por esta zona en la mayoría de los casos. «A mi perro no le gusta nada esta arena» nos dice el Miguel. Él, como tantos otros vecinos, no está especialmente satisfecho con zona. Sin embargo, también reconoce «que está bien tener un área tan céntrica».

Las dimensiones del área también generan recelos ya que los perros no tienen suficiente espacio para correr. Así lo cree  Roxana. «Yo no veo que sea tan pequeño. Ahora bien, es cierto que muchas veces los perros no pueden correr con tranquilidad. Vendría bien un poco más de espacio, sería ideal «.

Aunque uno de los principales problemas que presenta el área es su proximidad con la carretera. A pesar de que las rejas son aparentemente lo bastante altas para evitar que ningún perro salte hacia la carretera, los perros, al ver un vehículo cercano, a veces mueven la grava, que va hacia la carretera. Esto puede provoca incomodidad a los conductores y también a los propietarios, que deben estar especialmente pendientes de esta eventualidad.

La opinión de los vecinos y de la asociación Udols 

La opinión de Nacho, vecino de la zona, en cambio, es favorable: «yo, personalmente, estoy muy contento. Mi madre es quien normalmente pasea al perro, y nunca se ha quejado «. En cambio, Luis es muy crítico. «Es demasiado básico. Le falta protección y está al lado de la carretera. Además, genera demasiado polvo por los perros. No es adecuado «, lamenta.

Un problema añadido es que muchos propietarios han dejado de ir. Los vecinos aseguran que, tiempo atrás, era habitual ver mucha más gente, pero que ahora optan por otras áreas. Mientras tanto, el área de recreo de Hospital Clínic corre el riesgo de quedar olvidada.

Desde la asociación Udols trabajan por el bienestar animal en áreas urbanas. Una de las tareas que realizan habitualmente es el análisis de áreas para perros. En su opinión, esta área presenta muchos problemas. «Los perros respiran polvo generado por el pavimento de la grava que no es nada beneficiosa para la salud de los animales, pero tampoco para las personas». Desde Udols, lamentan «la grava abrasiva que afecta las patas de los perros» y que podría ser la causa por la que muchos prefieren la zona cementada. «La sensación de calor excesivo» es otro problema con el que los perros deben convivir en esta área, así como una ubicación demasiado cercana a la carretera. La asociación Udols lamenta que no haya ninguna adaptación para personas con movilidad reducida. «Hay una vecina en esta situación, que además tiene dificultades para acceder a la fuente», explican. Además, reclaman más sombras, ya que en verano el calor puede ser sofocante.

Consulta las nuevas áreas de recreo para perros en Barcelona

Las primeras jornadas felinas andaluzas: crónica de unas jornadas históricas

El pasado 23 y 24 de Febrero en Córdoba se celebraron las I Jornadas Felinas Andaluzas como anticipo al movimiento creciente y a la fuerza imparable de un amplio colectivo cada vez más sensibilizado con el maltrato a los felinos que habitan nuestras calles y preocupado por su bienestar. Particulares, asociaciones, protectoras, veterinarios, policías, abogados, políticos y un largo sinfín de personas de varias provincias españolas acudieron a un evento único que demuestra que la consideración hacia nuestros felinos está cambiando, que no se les puede ni debe considerar una plaga ni un objeto que se pueda menospreciar de cualquier manera, que no se les debe despreciar ni maltratar de ninguna forma, sino que merecen un respeto y un trato digno.

Las Jornadas abrieron con una excelente presentación a cargo de Mercedes Vara y Lola Alcaide, amenizada por una jovencísima y emocionada Gema García de la Asociación Gatitud, y de María que leyó un poema de Ruth Toledano dedicado a la figura tan poco reconocida de la cuidadora de colonias, “Yo besaría sus manos”. Se ofreció un vídeo homenaje dedicado a la figura tan poco reconocida del cuidador o cuidadora de colonias, siempre cargados, siempre a escondidas, siempre vigilantes y preocupados por los gatos de nadie, a los que conocen perfectamente y sufren por ellos como si fueran suyos. Seguidamente se visualizaron varios vídeos que reflejaron la realidad de cada provincia andaluza, algunos realmente muy crudos, y un mensaje de gratitud de Rosa Montero, el cual dio paso a una mesa redonda compuesta por una autoridad representativa de cada provincia andaluza :

  • Ana María Martínez por Almería, de la plataforma felina Seven Lives.
  • Rebeca Gascón por Cádiz, de colonia Torrox Felina, a la que mando un cálido abrazo especial y con la que espero compartir más charlas gatunas.
  • Angela María Luque por Córdoba, de la protectora Dejan Huella de Montilla.
  • Esperanza Moya por Granada, de la asociación protectora Por Patas.
  • Javier Montero por Huelva, de Zarpas y Huellas.
  • Dina Ríos por Jaén, del Colectivo Linares Felina
  • Marcos Canzian por Málaga, de la Protectora Aman.
  • Isabel Rodríguez por Sevilla, de la Plataforma Sevilla Felina y Arca de Noé Gatos Sevilla, a la que mando también un abrazo especial.

Dicha mesa redonda fue exquisitamente conducida por Agnès Dufau, presidenta de Plataforma Gatera Barcelona, que fue hilando un abanico de preguntas  que pusieron a la luz la realidad de cada provincia, los problemas, la soledad y la dificultad a la hora de implicar a las administraciones, la impotencia ante la impunidad de gravísimos casos de maltrato animal, la falta de programas, acuerdos, partidas y subvenciones, las dificultades con las que se encuentra cada colectivo para poder defender y conseguir implantar el CES o CER (Capturar, Esterilizar, Soltar o Retornar), la única política que está demostrada que funciona para el logro de una gestión ética de colonias felinas. Realmente fue un placer poder escuchar un diálogo tan sincero y a la vez tan sereno.

Abrió la segunda jornada el vice decano de la Facultad de Veterinaria de Córdoba, para dar paso a la primera de las ponencias del día, a cargo de Enrique Alonso, Doctor en Derecho y Consejero de Estado entre otros muchísimos títulos, que abordó con precisión magistral las obligaciones locales dentro del marco legal de la normativa europea. Siguió Agnès Dufau, Presidenta de Plataforma Gatera, licenciada en Ciencias políticas y Máster en Derecho Animal, acérrima defensora de la política pública del CES o CER o TNR como único método viable para un control ético de las colonias. Habló de la imposibilidad de la eutanasia cero sin un buen programa de CES, del efecto vacío, de la complejidad de las reubicaciones y se presentó el ya conocido Manifiesto Felino, brillante hoja de ruta del bienestar felino.

Tras la pausa continuó Ana Martínez Rosales, licenciada en Derecho, coordinadora de Pacma Almería y miembro fundacional de Seven Lives, que expuso brillantemente y con contundencia y claridad la realidad de las perreras y zoosanitarios, y denunció las graves deficiencias de la ley andaluza de protección animal. Siguió mi propia ponencia con la que tuve el privilegio de compartir la realidad de los gatos abandonados y su sufrimiento, la pasividad de las administraciones ante la obligatoriedad de la implantación del microchip, la impunidad ante el abandono y el maltrato, el colapso en los refugios y protectoras, una realidad presente en todas nuestras comunidades. La última ponencia fue a cargo de Valentina Aybar, licenciada en Veterinaria y actual Presidenta de Gemfe, que asesoró magistralmente cómo llevar a cabo un  manejo amable de los felinos, rompiendo tópicos con las enfermedades que sufren, apoyando  la política del CES y el uso de los test sólo cuando es necesario un diagnóstico, implicando el trabajo de los veterinarios en beneficio de la población felina más necesitada.  Concluyó las jornadas Emma Infante, cofundadora de Futur Animal, secretaria de Plataforma Gatera y Máster en Derecho Animal, luchadora incansable, ofreciendo una valiosa valoración final de la participaciones después de encargarse de moderar los tiempos y presentar a los conferenciantes, con gran maestría y envidiable naturalidad.

Sin duda, estas jornadas representan un antes y un después en la política de protección del gato callejero en Andalucía extensible al resto de comunidades. Lo más relevante es que por primera vez ha habido un ánimo común de unión, una necesidad conjunta de aunar fuerzas, denunciar los incumplimientos de ley, y reclamar asesoramiento legal para saber qué derechos tiene el ciudadano y qué derechos tienen nuestros gatos para poder defenderlos con propiedad y con conocimiento dentro del marco legal de protección animal. Agradecimientos infinitos a las personas que han demostrado gran fuerza y valentía para levantar la voz en beneficio de los más  desprotegidos, a Fapac (Federación de Asociaciones Protectoras de Animales de Córdoba) por la organización, a Mercedes Vara y Los gatos de Wally,  a Lola Alcaide , a Gema García. Agradecimientos muy especiales a Mercedes Vara por su amabilidad y cortesía, por hacerlo todo tan fácil, y por su fuerza y grandeza para organizar un evento de semejante valía. Agradecimientos a cada persona que regaló su tiempo con ilusión para acudir a la llamada de una cita histórica en la que todos salimos ganando pero en la que sobre todo salen ganando ellos, nuestros gatos, nuestros amados felinos, preciados tesoros, seres desconocidos y maravillosos a los que hay que cuidar y proteger como lo que realmente son : una obra maestra de la naturaleza